de lo general, a lo particular…

de la naturaleza a la esencia…

de la cáscara al núcleo…

al principio, fue una masa buena, de esas que se utilizan como caballito de batalla en mil y una recetas

que me invita a modificarla un poco en su elaboración, agregándole semillas de amapola y a instalarla en tres diferentes escenarios: 

primero, en la coparticipación con un relleno, que a manera de continente, se acomoda en una tarta cuyo enrejado de la capa superior -a medias- deja entrever al espectador el secreto de su contenido apelando al sentido especulativo y al olfato de éste, antes de su ingesta…

segundo, en la fusión de sabores agridulces, juntando frutas (en este caso, manzanas) con queso, y amalgamándolos con azúcar sin refinar para que en el horneado, los jugos de la fruta se ensamblen con la suavidad del queso y la ternura de la masa juegue el papel del abrazo que proteja los sabores en la rueda de ese encuentro…

y en el tercero, como protagonista, actuando sola, porque las fronteras del acto creativo aquí se desdibujan de manera clara, en esa paradoja de la constatación.

iba a colocarle, una vez horneada, unas frutas con crema batida o  una crema pastelera, pero me seduce su forma y se me hace como una suerte de sacrilegio el quitarle ese mensaje de comunión entre los dos lenguajes, de manera tan pura: me sugiere la síntesis de mi búsqueda, por lo menos en este momento.

y me recuerda el camino de las formas, en ese juego, donde los roles de continentes y contenidos se mezclan, se encastran de manera perfecta, se vuelven uno solo, como en este caso, para darme la luz (aunque más no sea por un momento) de que todo se encuentra vinculado con todo...

y esa clarividencia me otorga una suerte de alegría, de paz... 

me deja por lo menos la esperanza de que esa quimera que persigo, por lo menos, tiene algo de asidero, que se hace tangible para fundamentar parte de la locura que muchas veces me  separa de los demás.

sin triunfalismos, porque tengo consciencia de lo efímero de estas certezas...

hoy me duermo con una esbozada sonrisa en los labios…

en Miami, a los 8 días de Febrero de 2021

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From the general to the particular…

from nature to essence ...

from the shell to the core ...

At first, it was a good dough, the kind that are used as a workhorse in a thousand and one recipes

which invites me to modify it a little in its preparation, adding poppy seeds and installing it in three different scenarios:

first, in the co-participation with a filling, which, like a container, is accommodated in a cake whose lattice of the upper layer - gropingly - lets the viewer glimpse the secret of its content by appealing to the speculative sense and smell of it, before of your intake ...

second, in the fusion of bittersweet flavors, joining fruits (in this case, apples) with cheese, and amalgamating them with unrefined sugar so that in baking, the fruit juices combine with the softness of melted cheese and the tenderness of the dough plays the role of the embrace that protects the flavors in the wheel of that meeting ...

and in the third, as the protagonist, acting alone, because the boundaries of the creative act here are clearly blurred, in that paradox of verification.

I was going to place some fruit with whipped cream or a pastry cream on it, once it was baked, but its shape seduces me and it seems like a kind of sacrilege to remove that message of communion between the two languages, in such a pure way: it suggests to me the synthesis of my search, at least at this moment.

and it reminds me of the way of forms, in that game, where the roles of continents and contents are mixed, they fit perfectly, they become one, as in this case, to give me light (even if not for a moment) that everything is linked to everything ...

and that clairvoyance gives me a kind of joy, peace ...

At least it leaves me with the hope that this chimera I am pursuing, at least, has something of a grip, which becomes tangible to support part of the madness that often separates me from others.

without triumphalism, because I am aware of the ephemerality of these certainties ...

today I fall asleep with a sketchy smile on my lips ... 

Miami, 02.08.2021