Experiencia 2016

En abril de 2016, tuve el privilegio de participar de una experiencia en Uruguay, cumpliendo asi un proyecto que habiamos iniciado con mi hija Sofia.

La experiencia consistia en trasladar desde Montevideo, hasta el local de Bodega Casa Grande, en los limites de la capital, a un grupo de personas para hacerlos participar de la degustacion de los vinos que la bodega-boutique ofrece, maridandolos con un menu que habia confeccionado desde Montevideo, donde se les ofrecio hors d'oeuvre, appetizers, plato principal y postre, en un entorno que es magico.

A la llegada a la bodega de los visitantes (que se los traslado en una van que venia de Montevideo), los propietarios de la bodega, Francesca Dito di Giorno, su esposo e hija, mostraron e hicieron una pequena resena de los vinedos, luego de lo cual se los condujo a los fantasticos galpones donde se sirvieron los hors doeuvre: shrimp kataifi con sweet chili sauce; apple gorgonzola crostini; chicken satay con peanut sauce y almond fritter brie con mermelada de lingonberry, todo acompanado con un vino espumante de la bodega.

Finalizada la degustacion de los hors d'oeuvre, los invitados pasaron a las instalaciones que posee la bodega, en un fantastico jardin de invierno donde las mesas estuvieron decoradas por Sofia Marinoni y Agustina San Roman para el evento, en donde se sirvio como appetizer: una sopa crema de tomate y una ensalada con una reduccion de Yuzu y miel, para luego pasar al plato principal que consistio en: asado negro; gratin dauphinoise; esparragos, cherry tomates y champignones salteados sobre un nido de kataifi; con una salsa de Oporto, acompanado con los vinos de la bodega y unas aguas saborizadas.

De postre: Babel de berries, pastries y crema pastelera.

Cafe, te y una grappa elaborada por la casa.

Realmente el evento resulto magico, gracias al trabajo en equipo que conformaron la flia. de Bodega Casa Grande, Sofia Marinoni, Agustina San Roman, el equipo de colaboradoras que ayudaron en el servicio de toda la comida (con mucho profesionalismo y simpatia) y por ultimo, pero no por eso menos importante, la posibilidad de hacer grafico el trabajo en conjunto, con la magnifica fotografia de Tincho Chiesa y Santiago Rovella.

No tengo palabras para terminar de agradecer el privilegio de haber participado de esta experiencia.

Valio la pena.

Gracias a todos.